A los pobres sin voz ni justicia,
A los mártires de las malditas guerras,
A los militantes defensores de la dignidad, los derechos del Ser Humano y el Entorno Ecológico,
Y a los teólogos de la liberación,
Por quienes y con quiénes –por Él, con Él y en Él-,
El tiempo se hace cristiano
Y la espera esperanzada.
PS: Parafraseando al digno y admirado obispo catalán Monseñor Pere Casaldáliga y Pla. El movimiento social de rebeldía y esperanza que asumen todos los hermanos latinoamericanos que luchan y sufren por causa de la maldita hegemonía capitalista salvaje globalizada despótica y desalmada, y por su no menos malditas guerras.
Con esperanza y memoria.
María Mercedes Peralta Rojas.
Paiguano/Elqui, 18 de octubre de 2016.